Pinchazos en moto: cómo prevenirlos y repararlos

Todos tenemos claro que los neumáticos es lo único que nos mantiene en contacto con el asfalto.  Por ello es clave, tanto conservarlos en perfecto estado, como solucionar esas incidencias que nos puedan dejar tirados en una ruta o viaje:

Aunque no se trate de una avería grave es tan importante intentar evitar un pinchazo como, para en caso de que se produzca, saber cómo (si está en nuestra mano) solucionarlo al a máxima brevedad posible para prever males mayores. Conocer nuestra moto, además de saber comportarnos ante estos imprevistos, nos ayudara a superar estas situaciones.

PREVISIÓN DEL PINCHAZO

Vamos a darte un primer consejo: cuida tus neumáticos.

Su buen estado de lo que nos da equilibrio y nos mantiene en contacto con el suelo. 

Es fundamental mantener una presión adecuada es la primera de la lista, además de no estirar su uso de vida más de lo recomendado nos puede evitar más de un susto, por no hablar de una posible sanción. 

Debemos evitar restos que puedan estar en la carretera: clavos y otras piezas metálicas; normalmente están por donde no suelen circular las máquinas de limpieza. Por no hablar de los arcenes, donde caen los restos proyectados del uso de la carretera. De esa forma nos alejaremos de más peligros. Así mismo es aconsejable evitar en lo posible badenes, alcantarillas y otras imperfecciones que pueda haber sobre el asfalto. Todas estas son pequeñas costumbres que nos ayudarán a reducir el riesgo de pinchazo.

Si cuidar los neumáticos era nuestro primer consejo, lo lógico es que sepamos que “botas” calza nuestra moto. Ya que, dependiendo del tipo de neumáticos que montemos: gomas con cámara, sin cámara o Tubeless neumáticos sin cámara esto influirá en la avería y el arreglo de estos.                                                                                                           

Aunque por mucho que preveamos un pinchazo, es muy posible que sea inevitable. 

REPARACIÓN DE NEUMÁTICOS

Hay que tener en cuenta que cada pinchazo es un mundo y, sobretodo, dependiendo del tipo de neumático que tengamos.

Neumáticos con cámara

Con este tipo de gomas, existe la posibilidad de que ante un pequeño pinchazo se complique y tengamos un reventón. Con lo que, si la rueda comienza a perder aire y por tanto desinflarse, será necesario sustituir la misma. 

Pero antes vamos a ponernos en situación:

Por un momento piensa en la operación que supone cambiar un neumático de bicicleta. Sencillo, ¿no? Pues ahora extrapolemos esa idea a nuestra moto, un aparato que pesa unos 200kg y con unos neumáticos ostensiblemente más gruesos. Seamos sincer@s, como estemos sol@s en esta situación, no es tarea fácil.

Desde tener el juego de llaves necesario para desmontar la cubierta, sacarla, reparar el neumático y volver a montarla... o nos pilla en un lugar inhóspito y perdido o es muy probable que acabemos llamando a un profesional.

En caso de que el pinchazo no sea muy grave, existe la opción de un Spray de Reparación de neumáticos, que se inyecta en los mismos sellando los huecos. Seguidamente recuperaremos la presión con nuestra bomba de inflado o cartucho de aire, y circularemos con cuidado hasta poder sustituirla por una nueva a la mayor brevedad posible.

Neumáticos Tubeless

Tener el típico ‘reventón’ en este tipo de neumáticos es muy poco corriente, ya que si un clavo se clavara en nuestra moto, el mismo haría de tapón controlando la perdida de aire. Con lo que esta se haría de manera progresiva y nos daría tiempo a llegar a una gasolinera para inflar, a un taller o a nuestro propio garaje. Aunque una bomba de inflado portátil, nunca está de menos. Pese a poder seguir circulando a baja velocidad, no debemos arriesgarnos a una avería mayor, con lo que recurrir a un profesional cuanto antes, es lo ideal.

En caso de que el pinchazo nos pille de ruta, lo mejor es contar con un kit de reparación para pinchazo Tubeless, como media de urgencia retiraríamos el clavo y rellenaríamos el daño con  un spray de espuma hasta poder llegar a un lugar de reparación. Ten en cuenta que estos reparadores son para daños menores, si la cámara está muy dañada solo lograremos empeorar la avería.

Neumáticos sin cámara 

¡Ahora sí! Si disponemos de un kit básico de reparación y calzamos este tipo de neumáticos, podremos arreglarlos por completo.

Para mantener la mayor presión dentro del neumático, lo primero que debemos hacer retirar, con unos alicates, el objeto que nos hayamos clavado. Tras esto, debemos cauterizar la herida con la mecha y el caucho, una vez esté bien untada con la disolución. Una vez seco; limamos el sobrante (tampoco demasiado, que el asfalto hará el resto). Y directos a una gasolinera para poder ajustar la presión que hayamos perdido. 

Recuerda que en Babiek tenemos todo lo que necesitas y te asesoraremos sobre cuál es la mejor solución, para que una pequeña contingencia no nuble un día de grandes aventuras en  moto.

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¡Prepárate para la aventura!